Honda CR-Z: La resurrección del CRX Híbrido

Honda comenzó poco a poco a preocuparse por desarrollar un auto que, no sólo fuera deportivo, sino que también pudiera compartir las bondades de los nuevos prototipos ecológicos que el resto de fabricantes comenzaba a idear, de ahí surge la idea de un modelo compacto que por dentro, poseería el espíritu de uno de los grandes exponentes de la década de los 80, el Honda CRX.

Compacto de aspecto deportivo y con de emisiones contaminantes ínfimas, el Honda CR-Z promete ser un imperdible para muchos. Digno sucesor del legado del CRX que hasta la fecha a muchos les parece uno de los mejores autos que han sacado los japoneses. Paradójicamente, el CRX no solo era un coupe compacto que gustara por su excelente maniobrabilidad, sino que por la eficiencia en el uso del combustible, lo que hoy constituye otro elemento difícil de ignorar en el nuevo Honda CR-Z, pues en antaño el modelo original entregaba 41/50 mpg según los estándares actuales, marca replicable en parte por el nuevo modelo nipón, aunque con otras ventajas comparativas impensadas para esos años.

Las dimensiones del CR-Z son un poco mayores que las del CRX antiguo, pues aquí nos encontramos con un auto 15.9 pulgadas más largo, 4.6 pulgadas más ancho y 4.1 pulgadas más alto respecto del modelo al que sucede. En la organización estructural de los pasajeros, sigue siendo un tipo 2+2 (igual que en Japón y Europa), pues en otros mercados sólo era conocido como de dos asientos. Tracción delantera, motor de cuatro cilindros de (1.5L y 1.6L) y transmisión manual son parte de la mecánica utilizada, aunque sólo el Insight y el CR-Z poseen la tecnología híbrida.

El propulsor eléctrico no sólo funciona dándole energía al auto, sino que también se acompaña de otro elemento que le permite regenerar la energía utilizada, la forma de hacerlo es capturando la energía cinética en una batería de 100 volts en las frenadas. La potencia total del Honda CR-Z es de 122 caballos de potencia, con una cantidad de 128 libras de pie de torque disponibles, algo que si bien es cierto no parece ser demasiado, estadísticamente lo convierte en el híbrido más preparado de la línea de Honda actual.

Explorando al Honda CR-Z a fondo

Las críticas no se dejan esperar cuando se leen, a priori, las características de este compacto de silueta deportiva, ya que siendo un vehículo híbrido, que dicen es el mejor de los creados hasta ahora por Honda, presenta a penas un consumo de combustible homologado de 31 mpg en ciudad y 37 mpg en carretera, cifras que pueden verse aumentadas al utilizar una transmisión tipo CVT a 36 mpg en ciudad y 38 mpg en carretera, de esta forma todos se preguntan ¿Cómo puede ser mejor el nuevo CR-Z si el Insight ofrece el doble de autonomía de combustible en carretera? ¿Será que han retrocedido en las cifras por entregar más potencia?

Definitivamente el Honda CR-Z no ha retrocedido en nada, muy por el contrario, cuenta con varias ventajas comparativas respecto de sus hermanos de tecnología, sólo que no se aprecia tan rápido. El nuevo modelo híbrido de los nipones que sale al mercado en el 2010, fue catalogado por CARB (California Air Resources Board) como un modelo AT-PZEV, acrónimo que quiere decir “Advanced Technology –Partial Zero Emissions Vehicle”, lo que es la categoría más limpia que puede entregarse a un modelo que funciona con un motor a combustión, lo que significa que no emite contaminación por un tubo de escape posterior. Para quienes deseen hacer una comparación con el exitoso Honda Insight, éste sigue siendo un modelo ligeramente contaminante de muy bajas emisiones, no pudiendo alcanzar el nivel del nuevo CR-Z.

El nuevo modelo híbrido japonés es más pesado que su antecesor, el CRX, pero lo compensa con una potencia mayor, lo que hace presumible consiga alcanzar las 60 Mph (100 Km/h) en 8.3 segundos aproximadamente. El registro de aceleración no es lo que se espera de un vehículo que se haga llamar “deportivo”, pero como ya ocurrió anteriormente con el manejo del combustible, hay que pensar que el legado del CRX no va por la rapidez con que cruzaba la carretera, sino más bien con el extraordinario manejo que le permitía una mecánica e ingeniería privilegiada, donde la aerodinámica y la suspensión jugaban un papel fundamental.

El Honda CR-Z contará con un brazo de control de suspensión deportiva modificado por MacPherson, por lo que las expectativas serán altas realmente. Los frenos del CR-Z también están bien trabajados, pues se utilizarán discos ventilados adelante y atrás, además de contar con tres configuraciones para el uso del propulsor, cuales son: sport, normal y económico.

Lleno de sorpresas, el CR-Z innova también en el apartado interior e instrumental con pequeños detalles que marcan la diferencia, ya que por ejemplo, de las tres configuraciones de uso del modelo, las luces del tacómetro cambian a rojo en la modalidad deportiva, azul para normal y verde en económico ¿No es ese un detalle interesante?

Tecnologías destinadas al apoyo en la conducción en el Honda CR-Z

• Asistencia para el arranque en colina,
• Control de estabilidad
• Transmisión de seis velocidades.

Otros elementos presentes en el Honda CR-Z

• Sistema de sonido de seis parlantes
• Control de climatizado automático
• Llave de acceso a distancia
• Control crucero
• Llantas de 16 pulgadas
• Encendido automático de luces LED
• Bluetooth
• Sistema de navegación satelital

La comercialización del modelo no se hará esperar más, para ello Honda ha informado que cuenta de antemano con 10.000 unidades ya solicitadas en tan sólo un mes, lo que constituye un objetivo 10 veces mayor a lo que tenían planeado comercializar. Otro antecedente positivo es el hecho de saber que la mitad de los compradores del nuevo CR-Z son nuevos propietarios de un Honda, pues antes disponían de otras marcas. Las expectativas actuales de los fabricantes japoneses son el vender 40.000 o 50.000 unidades del CR-Z por año mundialmente, comenzando las ventas en el verano en Estados Unidos y Europa.