Nueva tecnología para la reducción del consumo de combustible
Las tecnologías disponibles para el ahorro de combustible en vehículos nuevos, incrementa el precio de los mismos, aunque existen alternativas viables a cambio de un aumento mínimo,
Las tecnologías disponibles para administrar de mejor forma la utilización del combustible en los automóviles modernos, no sacrifica la seguridad y la comodidad interior por regla general, sean estos vehículos deportivos, para el transporte de pasajeros, camionetas o SUVs.
No obstante la posibilidad de optar por vehículos con una mejor tecnología para ahorrar combustible, el precio de adquirir un modelo económico que no sacrifique seguridad ni comodidad interior es alto, según lo demuestra un informe presentado por el Consejo Nacional de Investigaciones (National Research Council).
Quienes se oponen al aumento de extracción de petróleo por razones ambientales, proponen la conciliación de los nuevos precios de vehículos más tecnológicos, a cambio de una mejora medioambiental general.
De acuerdo a las investigaciones realizadas, se sometieron a estudio tres tipos de motores para verificar el nivel de impacto en los precios que tendría mejorar la tecnología del ahorro de combustible, obteniendo los siguientes resultados:
- La implementación de una tecnología mejorada para la administración del combustible, supone un ahorro del 29% en combustible en autos medianos, pequeños y también en camionetas de gran volumen. El costo de implementar este sistema se traduce en $2,200 extras para el consumidor.
- Realizar una transición de motores a gasolina a propulsores diesel, implica un ahorro de combustible cercano al 37%, aunque involucra un costo adicional para los usuarios de $5,900 por cada vehículo comprado.
- La inclusión de tecnología híbrida a gas o a electricidad, permite un aumento del rendimiento en el uso del combustible de un 43% aproximadamente, aunque supone un alza de los precios cercana a los $6,000.
De acuerdo a lo señalado por el Consejo Nacional de Investigaciones, es posible para los usuarios conseguir un ahorro de combustible óptimo por un valor muy menor a las opciones presentadas anteriormente, todo ello con la simple incorporación de sistemas de utilización variable de los cilindros de un motor, donde por ejemplo un vehículo con seis cilindros puede funcionar con cuatro cuando las exigencias y la conducción no hagan preciso utilizar todo el potencial del propulsor. Aprovechar la tecnología recién comentada, aumentaría la administración de combustible en un 10% y sólo subiría el precio de los vehículos en $150 o $500.
De acuerdo a las reformas realizadas por EPA (Environmental Protection Agency), las nuevas normativas relacionadas con el consumo de combustible, que entrará en vigencia en el año 2012, serán de tipo progresivas, ya que se irán volviendo cada vez más estrictas hasta llegar al año 2016 donde los vehículos tendrán que presentar un promedio de consumo cercano a las 35 millas por galón.
Según los datos proporcionados por el Departamento de Transporte y la Agencia de la Protección al Medio Ambiente, en el año 2016 todos los usuarios podrán adquirir un vehículo que en promedio ahorrará cerca de $3,000 anualmente, considerando que en Estados Unidos se conduce por año 15,000 millas aproximadamente.
Aunque en los vehículos 2010 y en los modelos 201,1 que serán estrenados a partir del mes de noviembre con tecnología híbrida, se promete un ahorro de combustible interesante, se olvida que muchas veces el precio entre un modelo convencional y uno que utilice un motor eléctrico compensa el ahorro de combustible prometido, lo que en la mayoría de los casos obliga al conductor a esperar cerca de 8 o 10 años para recuperar la inversión inicial al momento de comprar el modelo híbrido. La gran esperanza para los consumidores está en los próximos vehículos eléctricos, cuyo consumo será mucho mejor administrado y tendrá un costo probablemente muy menor al de híbrido.