La NHTSA propone una nueva norma para airbags laterales
La agencia encargada de la seguridad en los automóviles, NHTSA por sus sigas en Inglés, propuso un cambio en la actual norma que regula la utilización de airbags laterales en los automóviles.
La propuesta de la NHTSA se refiere a los airbags laterales y plantea el desarrollo de una nueva generación de estos dispositivos, de mayor tamaño y más resistentes para evitar la expulsión de los pasajeros del vehículo en caso de volcamiento, recomendando que esta modificación sea adoptada de forma obligatoria por todos los fabricantes, para reducir las actuales 10.400 muertes que se producen anualmente en situaciones de volcamiento.
La nueva norma, según la NHTSA, cuando esté en pleno funcionamiento podría salvar de la muerte a aproximadamente 402 personas y evitarle serias heridas a otras 302 cada año, especialmente en casos de pasajeros que no llevan puesto el cinturón de seguridad, ya que las estimaciones de la NHTSA al respecto calculan que esta medida sólo beneficiaría al 13% de personas que lleven su cinturón de de seguridad.
Esta nueva norma, que de ser aprobada sería aplicable a vehículos cuyo peso sea de 10.000 libras o menos, obligaría a los fabricantes a dotar a los autos de airbags laterales de cortina, cuyo tamaño sea mayor que el actual, con una superficie superior a la de la ventana del auto cuando se desplieguen en caso de accidentes; además de entregar una mayor robustez de construcción y que puedan permanecer más tiempo inflados, de tal forma que no sólo actúen como cojines de aire, sino que además puedan entregar una suficiente protección para evitar los casos de expulsión del vehículo en caso de volcamiento.
La alianza de fabricante de automóviles de los Estados Unidos, organismo que agrupa a un total de 11 marcas, incluyendo a General Motors, Ford, Chrysler y Toyota se ha referido a esta iniciativa, indicando que la habían recibido y la estaban considerando.
Como siempre un problema económico
La actitud inicial de los fabricantes y su consecuente respuesta, evidentemente está determinada por un tema económico, ya que de acuerdo a las estimaciones iniciales de la NHTSA, esta medida tendría un costo total de 920 millones de dólares al año o lo que es lo mismo, encarecería en 54 dólares el precio del auto, aunque de acuerdo a reportes de la industria y validados por la NHTSA, la cifra podría ser menor. Unos 538 millones de dólares al año o unos 34 dólares de encarecimiento por auto.
Tampoco hablamos de tanto dinero para un dispositivo de seguridad que pueda mejorar el comportamiento del auto en situaciones de accidentes y volcamiento. Yo no se usted, pero yo pagaría esos dólares extra para asegurar aún más a mi familia o a mis seres queridos en casos de accidente.
De imponerse esta nueva norma, hecho que sabremos el próximo mes de agosto, pero si finalmente es aprobada, el plan es que al menos el 20% de los autos fabricados el 2014 la hagan efectiva y en el año 2017 sea de obligado cumplimento para todos los fabricantes, claro que durante este periodo, las marcas que cumplan oportunamente o de forma adelantada con este requisito podrían obtener beneficios y en cuanto a los pequeños fabricantes de autos, aquellos que disponer de un máximo de tres líneas de fabricación, podrían disponer de un calendario más flexible.
Y como estadísticas de cierre, recordemos que el 78% de los vehículos vendidos el año 2008 en los Estados Unidos disponía de airbags laterales de serie, por lo que hablamos de una nueva generación de estos dispositivos de seguridad más grandes, más firmes y que se mantienen más tiempo inflados. Debo admitir que estoy completamente de acuerdo con esta iniciativa, ya sean 1 vida, 402 o 10.000, cualquier mejora en la seguridad es importante y 34 dólares, creo que los pagamos todos.